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- Visitas regulares al veterinario: Las revisiones veterinarias regulares son esenciales para detectar y tratar cualquier problema de salud a tiempo. Los animales mayores son más propensos a desarrollar enfermedades como artritis, problemas cardíacos y problemas dentales, por lo que es importante mantener un seguimiento cercano de su salud.
- Dieta adecuada: Adaptar la dieta de tu mascota a medida que envejece puede ayudar a mantener su salud y vitalidad. Algunos animales mayores pueden necesitar alimentos bajos en calorías para controlar su peso, mientras que otros pueden requerir dietas especiales para tratar condiciones médicas específicas. Consulta con tu veterinario para encontrar la mejor opción dietética para tu mascota.
- Ejercicio suave y regular: Aunque es importante mantener a tu mascota activa, es crucial adaptar el ejercicio a sus capacidades físicas. Opta por actividades suaves y de bajo impacto, como paseos cortos y juegos suaves, para ayudar a mantener la movilidad y prevenir el aumento de peso.
- Comodidad en el hogar: Asegúrate de que el entorno de tu mascota sea seguro y cómodo. Proporciona camas suaves y cálidas, especialmente en áreas donde tu mascota pueda descansar cómodamente sin tener que subir escaleras u otros obstáculos.
- Atención a los cambios de comportamiento: Presta atención a cualquier cambio en el comportamiento de tu mascota, ya que esto puede ser un indicador de dolor o malestar. Los animales mayores pueden volverse más apáticos o mostrar signos de irritabilidad si están experimentando dolor o incomodidad.